25 SS GASTRONOMIKA

46 Super amara ha sido, es y será una de esas firmas guipuzcoanas íntimamente ligadas al Congreso. De su mano, Gastronomika siempre ha buscado superar las paredes del Kursaal para seguir con su vocación de llegar a la ciudadanía y no limitarse a congresistas y profesionales. ¿El método? El concurso ‘Chef x un día’: «Es la fórmula que en su día ideamos para llevar esa gastronomía de la alta cocina a la forma más popular posible, que es la calle». Con esta iniciativa, los clientes de estos supermercados pueden cocinar en el escenario del Auditorio del Kursaal con chefs profesionales. Este concurso se celebró por primera vez en el Centro de Donostia, más concretamente en la parte trasera del Buen Pastor, «para estar cerca de la ciudad». Luego tuvo lugar en el Boulevard y, finalmente, «llegamos al Kursaal en esa jornada tan popular que es la del domingo y en la que también están nuestros clientes desde hace años». Un claro ejemplo de lo que ha ayudado el Congreso a colocar el mundo de la sidra en el panorama internacional fue la cena inaugural de la última edición, de la que fue anfitrión Napoleón Lertxundi, propietario de Saizar: «Allí se congregaron muchísimos profesionales y periodistas internacionales de la gastronomía y se les sirvieron nuestras sidras maridadas. Gustó y sorprendió. Y abrió un abanico de ideas en la mente de los creadores culinarios». Más allá de esta actividad del propio Congreso llevada a cabo el año pasado, Lertxundi también nota cómo «cada vez hay un mayor interés de los congresistas en la sidra y las sidrerías. Estamos muy cerca de San Sebastián y muchos eligen nuestras sidrerías como el lugar ideal para reponer fuerzas y disfrutar de nuestra gastronomía». Gracias en parte también a Gastronomika, «la sidra va conociéndose fuera de nuestras fronteras, aunque la sidra natural del País Vasco todavía no refleja grandes números de exportación». Xabier Zabaleta, como presidente de la Asociación Jakitea, ha estado muchos años al frente de un comedor que en Gastronomika trataba de poner en valor la trascendencia de la cocina tradicional vasca. Casi 25 años después de aquellos inicios, considera que el objetivo se ha cumplido: «Siempre hemos pensado que es muy importante trasladar tanto al público de fuera como a nosotros mismos los valores de la cocina tradicional vasca, que es la base de nuestra gastronomía. Y creo que la hemos puesto en valor». También mediante esta iniciativa «hemos puesto en valor a los pequeños productores y, a través de Gastronomika, hemos conseguido crear un punto de inflexión para la cocina tradicional, que estaba un poco de lado y creo que la hemos impulsado, apoyando a los productores y productos locales». Gracias al Congreso, también han logrado «que los asistentes se dieran cuenta de la cultura gastronómica que hay de todo esto, más allá de lo profesional». No podía ser de otra manera. El pintxo debía tener una importante presencia en el Congreso. Pocos mejor que Jesús Santamaría, miembro del Instituto del Pintxo de San Sebastián, para explicar cómo el propio pintxo ha sido reclamo y al mismo tiempo ha sido puesto en valor por Gastronomika: «El Congreso ha contribuido muy eficazmente a poner en valor la importancia de la cocina en miniatura y el sector se siente muy agradecido a ese esfuerzo que ha empleado el Congreso en posicionar un movimiento gastronómico a nivel mundial que surgió en Donostia en los años noventa». Asimismo, Santamaría incide en que el Congreso «ha conseguido atraer el interés a nivel nacional y Donostia se ha posicionado a nivel internacional como la capital mundial del street food». Para Santamaría, la capital guipuzcoana «merece estar en el podio mundial de este singular concepto gastronómico» y si lo merece es «gracias al trabajo de muchos de nuestros profesionales». Mariano Rodríguez, sumiller del Restaurante Arzak, ha vivido en primera persona la evolución del Congreso. Y también ha sido testigo de cómo el vino ha ido ganando protagonismo en el mismo, de la misma manera que lo ha hecho en los restaurantes. Al punto de que «hoy en día hay grandes bodegueros que vienen a dar charlas, así como sumilleres relevantes, y eso es muy importante para todos los que trabajamos en cualquier ámbito del mundo del vino». Por todo esto, para sumilleres, propietarios de bodegas y enólogos San Sebastian Gastronomika se ha convertido también en «uno de los congresos más importantes que se hacen en España». Recuerda Rodríguez cómo hace años, el vino no era tan protagonista ni en los congresos: «Eran protagonistas los cocineros y la cocina, pero cada vez hay más gente que te pide antes el vino que la comida y eso es muy gratificante y es el fiel reflejo de que el mundo del vino se ha puesto en valor en todos estos años». Alfonso Reiriz Responsable de Marketing en super amara Napoleón Lertxundi Propietario de Sidrería Saizar Xabier Zabaleta Cocinero de Aratz Erretegia y presidente de la Asociación Jakitea Jesús Santamaría Miembro del Instituto del Pintxo de San Sebastián Mariano Rodríguez Sumiller del Restaurante Arzak «Llevamos la alta cocina a la forma más popular posible, la calle» «Cada vez hay un mayor interés de los congresistas en la sidra y las sidrerías» «A través de Gastronomika hemos creado un punto de inflexión para la cocina tradicional» «El Congreso ha puesto en valor la importancia de la cocina en miniatura» «Hoy en día hay muchos grandes bodegueros y sumilleres que vienen a dar charlas» Más allá del Kursaal El Congreso de todos

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